Los mejores museos de la CDMX que tiene que visitar

En la Ciudad de México, los museos forman parte del paisaje que la rodea. Aunque todos forman parte del legado cultural y popular de la ciudad, muy pocas personas realmente los conocen. Aunque sería imposible verlos todos, cada uno cuenta con exposiciones temporales que se pueden visitar mientras también es libre de explorar los demás edificios.

Sin embargo, dejando de lado la larga lista de museos, estamos conscientes de que estos lugares ofrecen oportunidades para sumergirse a fondo en el pasado y presente de la nación -y en ocasiones, de otros países-. Si vive en otra ciudad, no dude en comprar sus boletos de autobús con destino a la Ciudad de México y organice su itinerario para visitar los mejores museos de la siguiente lista: 

Museo de Frida Kahlo

El Museo de Frida Kahlo, a menudo llamado La Casa Azul, se encuentra en la casa natal de la artista mexicana, en el centro de la delegación Coyoacán.

Museo Dolores Olmedo

Este recinto cultural aúna naturaleza, historia y arte contemporáneo mexicano en un mismo lugar. En el museo se conservan las colecciones más significativas de obras de Diego Rivera y Frida Kahlo.

Museo Nacional de Arte

El MUNAL alberga una notable colección de arte mexicano creado entre la segunda mitad del siglo XVI y la primera del XX. Es importante fijarse en la arquitectura del edificio.

Museo de Arte Moderno

En este museo se conservan obras de arte mexicanas producidas durante la década de 1930. La colección del MAM ofrece una visión general de los movimientos artísticos que siguieron a la Escuela Mexicana de Pintura y Muralismo.

Museo Soumaya

Tres museos de visita obligada se encuentran en este edificio futurista creado por el arquitecto mexicano Fernando Romero con la ayuda de Frank Gehry. El museo más conocido se encuentra en la Plaza Carso, mientras que los otros dos están situados en la colonia Roma de la Ciudad de México.

Museo Jumex

Este museo de arte contemporáneo es la única estructura de América Latina construida por David Chipperfield, ganador del Premio Pritzker.

Arte popular mexicano: una intrincada e inesperada mezcla de culturas ancestrales

Dos características que prevalecen en la cultura y ayudan a conformar en parte la identidad del país son la riqueza y la multiplicidad. Esta identidad se manifiesta en el propio legado creativo mexicano, sin duda más rico por la diversidad de sus fuentes. México es considerado un verdadero exponente del arte popular, que sirve como excelente ilustración de ello.

El arte popular mexicano nos permite ser testigos de la inmensa diversidad que caracteriza a la cultura mexicana. Esta diversidad proviene de una mezcla de culturas prehispánicas e indígenas, costumbres y la fe católica, así como influencias asiáticas de todas las mercancías que llegaban al puerto de Acapulco. Situaciones similares se dan también en otros países americanos.

La Laca de Olinalá, cuyos delicados diseños y abundancia de temas encuentran su marco estilístico en el barroco novohispano, es una ilustración de la influencia posterior. La fastuosa elegancia de los diseños, que les dan la apariencia de vibrantes encajes, se debe, en su mayor parte, al comercio de mercancías a lo largo de la ruta de los galeones de Manila, que en el siglo XVIII recorrían medio mundo desde Filipinas hasta los puertos novohispanos de Acapulco y Tehuantepec antes de continuar tierra adentro hasta la montañosa ciudad de Olinalá.

Como hemos visto, los métodos empleados, la estética y la belleza de sus diseños reflejan este mestizaje en las obras de arte actuales. Por ello, nuestros artistas son un recurso vital para el mantenimiento de la cultura mexicana. Porque el arte popular mexicano es un arte vivo, sus creaciones nos ayudan a entender las costumbres, los valores y la historia de cada época y lugar. Cada uno de los 32 estados de México nos ofrece componentes especiales que nos permiten experimentar la cultura de nuestra nación de diversas maneras.

En resumen, el arte popular mexicano destaca por su diversidad, complejidad y manifestaciones artísticas, simbólicas y plásticas. Sus orígenes provienen de la fusión de las costumbres más antiguas; en sus componentes pueden detectarse influencias de Mesoamérica, Europa y Asia. Es una fusión de muchas culturas y lugares en la que los artistas forjan su identidad al tiempo que brindan al resto del mundo la oportunidad de apreciar la belleza de sus creaciones. El resultado son formas magníficas, colores vibrantes y materias primas inconfundibles.